En el último plenario realizado en Càlig se aprobó por unanimidad que los dos festivos locales de 2022 sean el 25 de abril, lunes de Sant Vicent, y el 6 de septiembre, día de la Mare de Déu del Socors.
Desde el inicio de la pandemia durante estas fiestas se preparaban “olleta calijona” para Sant Vicent para alrededor de 400 personas y paella para la Mare de Déu del Socors para 800-1000 personas. Las dos actividades se suspendieron los últimos dos años.
La alcaldesa, Ernestina Borràs, espera que “el próximo año podamos celebrar todas las actividades culturales a las que hemos tenido que renunciar desde el inicio de la pandemia”.