Este año se pudieron retomar de nuevo todos los actos programados para estas dos festividades, ya que los datos de la pandemia de la Covid-19, y siguiendo las normas nos lo permitieron.
El domingo día 1 de noviembre, el Cementerio Municipal de Vinaròs tenía una buena afluencia de gente, para visitar y dar memoria a los familiares y amigos allí enterrados.
Si bien la noche anterior y otras anteriores tuvimos algo de lluvia, la misma nos respetó de día y se pudo asistir al cementerio en estos días con toda normalidad.
El lunes día 2 se recuperó de nuevo la misa celebrada en la plazoleta del cementerio, oficiada por mossèn Emilio Vinaixa Porcar, y concelebrada por mossèn Cristóbal Zurita Esteller. Es esta una misa emotiva, por lo que representa, recordar a nuestros difuntos, y por recordarlos en el mismo “Campo Santo”.
Todo salió bien, y esperamos que el próximo año, lo de la pandemia sea ya solo un recuerdo.
Salvador Quinzá Macip